lunes, 25 de abril de 2011

Las cosas buenas siempre acaban

Las cosas buenas siempre acaban pero me llevo una buena sensación. He aprendido a ver todo con otros ojos, a valorar la inexperiencia y el aire nuevo, a defender aquello en lo que creo, a sentirme parte de algo mayor, a echar de menos, a olvidar pequeñas decepciones, a sentirme valorado, a valorar los verdaderos amigos, a aprovechar cada minuto al máximo, a ilusionarme con un “gracias”, al poner otra vez esperanzas en esa persona alejada, a sentirme orgulloso de una opinión, a ser útil…

Y todo ello, tras cinco días sintiéndome un ápice minúsculo de la Creación, tras un gesto, tras una sonrisa, tras un abrazo, tras una acción defendible, tras un objetivo común, tras un “te quiero”, tras un beso, tras una borrosa pero inolvidable noche, tras una cerveza, tras cuatro horas perfectas con una gran conversación… Lo dicho, las cosas buenas acaban, pero se suelen repetir. ^^ Gracias a todos los que habéis dejado huella en mí…

Ahora solo queda esforzarse al máximo, poco tiempo, pero con ilusión por poder repetir cosas así...

martes, 12 de abril de 2011

Rabia, ira, frustración.

Un día me prometí dejar de esperar cosas de la gente. De cierta gente en particular.
Cualquier cosa que pudiese ocurrir, bienvenida sería.
Pero hoy me he dado cuenta, de que no soy capaz de cumplir ni mis propias promesas.
¿Cómo puedo esperar cumplir las que hago a otros?

No aprenderé nunca...